Juan Jesús Vivas, presidente autonómico de la Ciudad de Ceuta, es el político español que más tiempo lleva desempeñando tan importante cometido. Nada menos que desde 2001 viene repitiendo en el cargo señal inequívoca de que ha sabido ganarse la confianza de los ceutíes. Y en su nuevo mandato ha confirmado a Kissy Chandiramani como consejera de Hacienda, Transformación Económica y Transición Digital lo que no deja de ser una muy buena noticia porque certifica con la renovación en el puesto que Chandiramani está realizando una óptima labor digna de tener la necesaria continuidad para consolidarse de manera plena y mejorar si cabe su gestión.
El nuevo nombre dado a la consejería de Hacienda de Ceuta, que incluye Transformación Económica y Transición Digital lo que pone de manifiesto son los grandes avances que tanto en su economía como en el ámbito digital está experimentando Ceuta de un tiempo a ésta parte. Y éste proceso evolutivo se ha podido ir conquistando de manera progresiva por la destacada labor desarrollada por Kissy Chandiramani y su equipo que han sabido abrir Ceuta a las ventanas de Europa y el mundo atrayendo la atención y el interés de numerosos países que han convertido la ciudad en centro de sus operaciones y negocios.
Refiriéndonos exclusivamente al ámbito del juego online la elección de Ceuta como sede social de grandes empresas de proyección internacional es una prueba inequívoca de que se dan allí las condiciones necesarias para que compañías de probado peso económico la seleccionen como ideal punto de residencia. Y éste es un hecho incontestable protagonizado por Kissy Chandiramani y sus colaboradores más directos, empeñados de manera sostenida en organizar acciones promocionales, en informar sobre las ventajas de toda índole que ofrece Ceuta, en estar presentes en los foros y reuniones para dejar constancia de que la ciudad autónoma es imbatible llegado el momento de facilitar la implantación de las empresas que apuesten por ella.
Por todo ello, y más cosas que se quedan en el tintero, la repetición de Chandiramani es una buena noticia, al tiempo que se reconoce la función realizada por una política brillante.
