Que los empresarios del juego que representan la columna vertebral del sector alcancen proyección y notoriedad más allá de las fronteras de la industria es noticia reconfortante. Significa que en sus trayectorias profesionales han sabido aportar una relevancia que trasciende, que ha servido para dar músculo a su empresa e infundirle un conjunto de valores dignos de ser recogidos y ensalzados por quienes están ajenos al juego.
Un ejemplo que viene al caso de ésta introducción se refleja en el reportaje dedicado a Jaume Sanahuja Yunyent por la revista Forbes en su edición de España. El trabajo de referencia se ocupa de la figura del fundador de MGA, de la importancia de su trabajo dentro del recreativo, del que sin duda ha sido y continúa siendo uno de sus principales referentes y del legado ejemplarizador que constituye el museo creado por don Jaume y que es historia viva, original y merecedora de ser conocida, que ilustra de manera detallada sobre la evolución experimentada por el recreativo a lo largo del tiempo. Una obra tenaz y extremadamente meritoria unida ya para siempre al apellido Sanahuja.
La notoriedad de los Sanahuja no se queda, afortunadamente, para la familia en la figura del progenitor. El testigo de una labor que tiene sus buenas dosis de titánica, por el compromiso y el esfuerzo que llevan implícitos, esta siendo recogido por sus hijos Joan y Enric que vienen multiplicándose en diversos frentes para proyectar y potenciar la imagen de MGA en sus plurales vertientes tanto en el ámbito nacional como internacional. La condición de firma pionera que ostentó MGA desde que irrumpió en el horizonte del juego no sólo se ha venido manteniendo si no que ha robustecido su presencia en los mercados y ampliado la cartera de sus productos, algunos de ellos ostentado la vitola de la exclusividad.
Partiendo de don Jaume la notoriedad de los Sanahuja garantiza su continuismo con Enric y Joan y contribuye a sostener en lo más alto el pabellón de MGA.
