Autor

DESDE LA AVENIDA Juan Ferrer

Sensatez política en Andalucía

4 de febrero de 2021

Desgraciadamente la sensatez política no suele ser una regla de normalidad en los tiempos que corren. Y ejemplos que lo confirman los recogemos a diario dando cuenta de los desatinos que se producen en éste campo teniendo como intérpretes al gobierno estatal o los autonómicos. En ocasiones el ejercicio de la política y su toma de decisiones da la impresión de que lo protagonizan unos iletrados, algunos confirman con sus hechos dicha condición, capaces de perpetrar los mayores dislates.

En la hora temprano del desayuno te enteras de la burrada política del día. Hoy me evito el soponcio con la noticia, reconfortante por otra parte, de que la Junta de Andalucía hace gala de sensatez manifiesta, lo que remacha aquello de que no hay regla sin excepción. Lo digo por su toque de atención a un municipio recordándole que las competencias en materia de juego son de su exclusiva competencia, por lo que no debe meterse en camisa de once varas en éstos asuntos. Aplausos cálidos por poner un poco de orden en tanta interferencia municipal como se está produciendo en muchas comunidades.

Y otro dato saludable también de Andalucía. La policía invitó a los vendedores de la ONCE a que dejaran de vender sus cupones, por cuestión de seguridad, por las calles. Lo normal es que cuando existen limitaciones impuestas por la pandemia en materia de horarios y movilidad éstas sean extensibles para todos. El proteccionismo descarado hacia ONCE y SELAE y la inquina y las prohibiciones al juego privado son antagonismos poco entendibles en una sociedad democrática.

Testimonios de sensatez como los de la Junta de Andalucía no son moneda de uso corriente en una España en la que la batuta de la política la llevan, en muchos casos, los más burros de la clase.