¡Por fin CEJUEGO!. La patronal acaba de convocar a los medios especializados a un desayuno informativo coincidiendo con un lustro de su andadura.
Y digo por fin porque CEJUEGO, a sabiendas de la labor de Carlos Duelo y Luis Miguel Cabeza de Vaca ante las Administraciones autonómicas, no ha expuesto suficientemente todo su trabajo. Qué es mucho. Entiendo que en ocasiones la mejor aliada para la consecución de los objetivos sea la prudencia, pues por la sensibilidad que demuestran muchas cuestiones de nuestro sector es preferible esta virtud. Pero también considero necesario que en determinadas circunstancias los representantes de los empresarios deben alzar la voz. Alejandro Landaluce, con pasado en empresas náuticas, sabrá enderezar el timón en unos tiempos de zozobra para nuestra industria. Son horas de angustia, con campañas orquestadas bajo el yugo de los partidos de extrema izquierda que desean, por todos los medios, hundir la línea de flotación de nuestro negocio. Landaluce debería ahora más que nunca tomar la iniciativa en materia de defensa del sector. Y no responder solo cuando se le pregunta.
Carlos Duelo y Luis Miguel Cabeza de Vaca, además de otros miembros de CEJUEGO, son profesionales bragados en escenarios igual de conflictivos que los actuales. Necesitamos un sector fuerte y competitivo porque los desafíos a los que se enfrenta son muchos. Hay que explicar la hoja de ruta de una Confederación que nació con vocación de unión y fuerza (no lo tomen como un mensaje sindical), dónde los méritos pretéritos solo deben servir para ahondar en los propósitos de futuro. Supongo que el próximo viernes conoceremos más sobre CEJUEGO. Pero lo más importante, como digo, no lo constituye lo hecho ayer sino lo que haré mañana mismo. Espero que entonces Landaluce no nos diga "pregúntame".