Autor

DESDE LA AVENIDA Juan Ferrer

Se van marchando

4 de junio de 2019

He sentido en el fondo del alma el adiós definitivo de Manuel Hernández. Estaba al tanto de su situación dolorida, de su salud resquebrajada, por persona muy vinculada a él que me mantenía informado. Pero a pesar de hacerme a la idea de lo irremediable, la noticia de su despedida me ha sacudido en lo más íntimo. Manolo, con quién choqué verbalmente muchas veces, y al que le debo un generoso apoyo en el arranque de mis publicaciones EJUVA y SECTOR, era un tipo indómito, visceral, arrojado y capaz de cantarle las verdades del barquero al lucero del alba. Y tenía un corazón ancho y abierto a sus amigos.

Al hilo de la desaparición de éste amigo hago recuento y caigo en la cuenta de que se han ido marchando un puñado de gentes que dieron sentido y fuerza al juego. Cada vez van menguando las filas de los guerreros de las primeras horas, de los luchadores que de la nada pusieron en pie un sector y lo levantaron y agrandaron. Y un sentimiento de perdida deja vía libre a la más pura de las melancolías. Nadie podrá quitarnos el dolorido sentir por tantas ausencias, por tantos nombres señeros que ya no están pero permanecen vivos en la plaza mayor de la memoria.