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DESDE LA AVENIDA Juan Ferrer

Manuel Vázquez, sin complejos

3 de diciembre de 2025

Cuando un sector se muestra unánime para resaltar la labor eficaz de un servidor público es sinónimo de que las empresas funcionan, que van hacia adelante y generan ingresos y empleos. Esto sucede en Andalucía con la figura de Manuel Vázquez Martín, secretario general de Hacienda de la Junta y antaño director general de Juego. Ahora asume ambas funciones a la vez como demostración palpable de su disposición para abarcar responsabilidades con tantísima naturalidad como probada eficacia.

He compartido mesa y mantel con Manuel Vázquez. Y en la distancia corta nuestro protagonista es persona sin afectaciones de ningún tipo, con predisposición al acercamiento cordial y al diálogo abierto. Responde a la fisonomía de un dirigente político sin complejos. Y esto se pone de relieve cuando aborda las cuestiones relativas al juego desposeído de ellos. Tampoco los tiene cuando se trata de defender al sector con razonamientos objetivos y carentes de prejuicios. Le dispensa al juego de su territorio una atención preferente que se traduce en normas con sentido evolutivo, con la clara intención de avanzar. Y realiza ésta trascendente misión sin alharacas, sin subirse a la parra del autobombo a la que tan aficionados han sido algunos.

El juego andaluz en general, y el bingo muy en particular, se muestran hoy reconocidos al papel que viene desempeñando Manuel Vázquez en cuanto a la ordenación y desarrollo de los distintos subsectores. Insistimos que en el caso del bingo andaluz se ha dado un paso al frente de proporciones muy considerables para el fortalecimiento de las salas en el más amplio sentido, económico y laboral. Tanto es así que está sentando un precedente muy positivo a escala nacional.

Fui testigo directo del almuerzo compartido con Manuel Vázquez y los presidentes de ASAEBIN y ASOBING. Al plantearse por mi parte el tema de una posible fusión asociativa Vázquez se mostró encantado con la propuesta pensando, dijo, en el robustecimiento empresarial del bingo. Y tuvo la muleta suficiente, nunca mejor dicho en un nombre y apellido con reminiscencias taurinas, de añadir que la cuestión quedaba en manos exclusivas de los dirigentes. Si bien sus palabras habían calado en el ambiente. Lo dicho: grande servidor público en el que no estaría de más se miraran algunos compañeros y compañeras. Omito nombres para no ganarme enemigos.