Conozco a Luis Carrasco Escoda, abogado y profesional destacado de la industria, desde mis inicios en el sector donde ambos éramos primerizos. Estaba en la asesoría jurídica de ELEVAL y también llevaba los asuntos de la familia propietaria de VAPREL. Hago un inciso para añadir que mucho tiempo después supe que el padre de Luis era Ángel Carrasco, personalidad en la entonces Radio Popular ( luego COPE ), cuyos conocimientos cinematográficos muy amplios se plasmaban en las páginas del diario Las Provincias, donde yo inicié mi aventura periodística publicando un artículo diario, por lo que tuve con Ángel un trato distante pero cordial. Las vueltas que de la vida.
Tan dilatado cruce de caminos entre Luis Carrasco y quién esto escribe, que lo ha convertido en la cabeza visible de ELEVAL, de la que fueron desapareciendo por imperativos de la edad quienes marcaron época en el Grupo, cuando suelo encontrarme con él, que es frecuentemente, le digo: «Te has convertido en el último mohicano”, a lo que me responde: «Ese eres tú”.
Sea cual fuere de los dos lo cierto es que Luis Carrasco, recién nombrado secretario general de la Asociación Valenciana de Bingos ( AVALBIN ), vicepresidente primero de ANESAR-CV y con otros cargos y atributos de responsabilidad es uno de los históricos del sector valenciano del juego que atesora experiencias y recuerdos para escribir un libro o una enciclopedia, puesto que ha sido testigo de múltiples avatares sectoriales algunos de los cuales supongo que no serán aptos para menores, dicho esto con licencia irónica.
Los relevos generacionales se van imponiendo como prueba inequívoca del inexcusable transcurrir del tiempo. Luis Carrasco sin embargo sigue ahí, en primera línea del bingo y el juego en su más amplia acepción, dando cuenta de que cuando se unen veteranía y saber la posibilidad de llevar a buen puerto los temas tratados está más que garantizada. Con AVALBIN Carrasco inicia una nueva singladura, de las varías en las que está embarcado, con el talante propio del que conoce a fondo el barco y está presto para tapar vías de agua en el supuesto de que se produzcan.
Luís Carrasco toca todos los palos del juego y lo lleva haciendo desde muchos años atrás. ¿ Como no va a ser candidato al título del último mohicano ? Lo es por batirse el cobre en las amplias praderas sobre las que se perfila el horizonte de la industria. El epílogo es cine puro.
