El FC Barcelona sale diciendo que el Real Madrid era el equipo del régimen franquista y éste le responde que fue Franco el que salvó en su día al club catalán de la ruina económica. Y para confirmarlo ha emitido un vídeo en el que los culés se muestran extasiados y aplaudiendo a rabiar con ocasión de la presencia del general en el antiguo campo de Les Corts.
Sea por esto, por Zapatero que fue el que encendió la mecha del franquismo para enmascarar su inutilidad manifiesta, o ahora por Sánchez que sacó a Franco del Valle de los Caídos para autoconvencerse de que pasará a la historia por semejante heroicidad, lo cierto es que el tema del franquismo está de moda. No hay más que ver los contenidos del periódico global al servicio de La Moncloa que no deja pasar un día sin dedicar doble página a las fosas del franquismo, los fusilamientos y las tropelías del nacionalcatolicismo. De lo ocurrido en el otro bando incienso para sus protagonistas y chitón sobre sus salvajadas.
Cada vez vamos quedando menos gentes de la época de Franco. Aquí la mayoría de los que hablan sobre aquél tiempo tocan de oído cuando no aleccionados por los relatos auspiciados por la izquierda política más radical. Que en la mayoría de los casos ni vivió ni ha recibido información medianamente objetiva de la historia que juzga y denosta.
Me sonroja ver y escuchar por la tele o asomándose a las columnas de los periódicos a tipas y tipos que vivían cómodamente, yo diría que espléndidamente durante el franquismo, y que no exhibían el menor sentido crítico contra el régimen, que ahora se erigen en paladines de la democracia y echan pestes del general y lo mal que se pasaba en la España de entonces. En la que los sujetos en cuestión no se cortaban un pelo para ensalzar los avances del régimen, la compra del seiscientos y el apartamento playero y la configuración de la clase media.
Lo cierto es que, entre la ignorancia general por puro desconocimiento de los hechos, el franquismo está de moda. Y los chaqueteros de ayer, los pocos que van quedando, se han recauchutado como los demócratas purísimos de hoy. Y Sánchez en la historia. Ya sabremos porqué.