Autor

DESDE LA AVENIDA Juan Ferrer

Antonio Martínez Alcázar

30 de septiembre de 2021

Nunca he podido disimular mi admiración por las personas luchadoras, las que no se arredran ante la adversidad, las que caen y logran sobreponerse a base de sacar ánimos de donde sea para salir adelante. A ésta especie singular pertenece Antonio Martínez Alcázar, un hombre del juego que vive para el juego desde que era un chaval y que siempre procura estar en la vanguardia del trabajo y de lo que en cada momento demanda el sector. Porque uno de los rasgos profesionales que distinguen la trayectoria de Antonio es su saber del juego y sus peculiaridades en el más amplio concepto, lo que le ha permitido anticipar propuestas que han estado en consonancia con las exigencias de funcionamiento de las salas planteadas en determinados momentos.    

No hay palo del juego que no conozca Antonio Martínez Alcázar, que no lo haya tocado y gestionado, que le sea extraño. De ahí que tenga acumulada una historia laboral y empresarial plagada de experiencias, con sus luces y sombras como siempre ocurre, pero en la que sobresale, por encima de cualquier otra consideración, su espíritu de lucha, su no bajar la cabeza, su salir a flote tras denodados esfuerzos por salvar temporales y tormentas, que de toda ha tenido.

He compartido conversaciones y confidencias con Antonio en etapas claves de su trayectoria profesional. De las que provocan altibajos emocionales fuertes que afectan y dejan huella. Y me quedo con su capacidad de recuperación, con su voluntad de seguir peleando en la jungla de la vida en la que nada es gratis y con su tesón para saltar obstáculos que nunca faltan. Hoy Antonio Martínez Alcázar lleva la batuta de su gran obra que es INFINITY GAMING y yo celebro que su apuesta esté resultando vencedora.