Representantes del Ayuntamiento de Cerdanyola del Vallés ( Barcelona ) visitaron las instalaciones de MGA. La noticia me parece estupenda. Todo lo que el sector haga para abrirse al ámbito de la política y de la sociedad en general constituye un síntoma de normalidad y una proyección de sus empresas. La industria debe despojarse de complejos y mostrar su auténtica imagen. La de un sector muy avanzado tecnológica y profesionalmente, que genera millonarios ingresos a las administraciones y sostiene miles de puestos de trabajo. Que está firmemente comprometida con un decálogo de buenas prácticas que denota una voluntad generalizada de responsabilidad corporativa.
Las grandes empresas del juego privado tienen que intensificar sus relaciones con el poder político llevándolo a su terreno. Unas pocas hace tiempo que vienen haciéndolo. Pero éste marco de conocimiento sectorial por parte de los gobiernos hay que transformarlo en algo habitual y no en un suceso extraordinario. Que consejeros de autonomías, reguladores o miembros de agrupaciones políticas tomen contacto físico con empresas del sector, recorriendo sus plantas de producción, tomando contacto directo con su realidad sin prejuicios de por medio, adquiriendo información de primera mano por boca de sus dirigentes servirá para hacer pedagogía y mostrar la cara verdadera de una industria que se afana por progresar y ser cada vez más competitiva.
Hay que invertir económicamente para dotar de fuerza y capacidad innovadora al sector. Esto es fundamental. Pero también hay que incentivar todo lo que se refiere al conocimiento real de la industria. Haciendo hincapié en sus procesos creativos, en el fortalecimiento de sus recursos técnicos y humanos, en sus mejoras en equipamiento y personal. En definitiva se trata de abrir las puertas de nuestras empresas y mostrar con legítimo orgullo todo lo que se ha ido progresando. Esta es la mejor pedagogía que puede realizarse. Al tiempo que es un recurso válido para desmontar tanta patraña como circula por ahí.
