Cirsa ha decidido finalmente no abrir una sala de apuestas en La Seu d’Urgell, tras haber comunicado su decisión al ayuntamiento esta semana.
La empresa ha tomado esta decisión “por su propia voluntad”, según confirmó el alcalde Joan Barrera, quien añadió que tanto los vecinos, las entidades locales y el propio consistorio estaban en contra de la iniciativa. Barrera expresó su satisfacción por la resolución pacífica del conflicto y valoró positivamente la actitud de Cirsa.
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