Autor

DESDE LA AVENIDA Juan Ferrer

Supervelocidad administrativa

25 de enero de 2022

La consejería de Hacienda y Modelo Económico de la Comunidad Valenciana sacó a la luz informativa el Informe Anual del Juego del año 2020. Tranquilos, han leído bien, no hay error que valga. Hablamos de 2020 o sea que el informe nos llega, por fin, con un añito de retraso cumplido. Esto no es ninguna novedad: la actuación de Hacienda a la hora de inventariar los datos del juego correspondientes al ejercicio siempre se han hecho con el freno de mano puesto, con rigurosidad muy parsimoniosa, con retardo clamoroso que se ha venido repitiendo y escandalizando. De nada han valido las tímidas voces levantadas, si es que se alzaron alguna vez, solicitando más velocidad, más afán en la labor, más nervio y menos indolencia. Todo en vano, el informe lleva de manera impepinable idéntico retraso que los trenes de los años cincuenta que se sabía cuando salían pero nunca la hora de arribada.

Esto del informe y de su lentísimo parto es un mal menor aunque resulte muy irritante por la contumacia en su crónico retraso. Lo malo es que la pasividad administrativa de la Generalitat Valenciana respecto al juego se extiende a todas las áreas de gestión. Y encrespa y cabrea de lo lindo a fabricantes y operadores la calma extrema con la que se procede ante la tramitación de cualquier expediente. Las pérdidas de tiempo para aquéllos que demandan celeridad y soluciones son cuantiosas. Aquí impera la minuciosidad en todo y por todo, el vuelva usted mañana y traiga la póliza o el aval que falta. O sea la pachorra administrativa elevada a la máxima potencia. A éste paso, lento pero muy seguro, el informe de 2022 nos llegara en el 25. Pero muy aseadito y con rigurosidad acreditada. Supervelocidad se llama eso. ¿ O no ?