Autor

DESDE LA AVENIDA Juan Ferrer

Tristeza

2 de octubre de 2020

Está resultando triste a la vez que cansado auscultar a diario la realidad del juego. Y lo es porque en tiempos tan difíciles como los que vivimos no vemos que las administraciones reaccionen en la medida deseada para evitar el colapso sectorial y la desaparición de muchos negocios circunstancia que ya se está produciendo.

Un paseo por cualquier ciudad permite visualizar el cierre de muchos bares, algunos de los cuales eran establecimientos clásicos, por antigüedad y arraigo, dentro de la fisonomía urbana. Bingos y salones registran una caída de afluencia de público sin precedentes y de persistir las condiciones vigentes para su funcionamiento durante un tiempo dilatado se anticipan ceses definitivos de la actividad. Son numerosas las pequeñas y medianas empresas que ya carecen de fuerza para aguantar la tremenda caída de ingresos que soportan y se enfrentan a un cercano adiós.

Mientras esto acontece las administraciones se mantienen en sus trece. Limitando horarios y aforos, no atendiendo las llamadas de auxilio en forma de dispensas o facilidades tributarias o en el estudio de ayudas. La insensibilidad es manifiesta y la tristeza que se desprende de éstas posturas también. Con ellas contribuirán al hundimiento del buque sectorial.