Estoy a la espera de la llegada de mis amigos. Que los tengo y buenos, sólidos, anclados en el afecto mutuo. Amigos del alma y de aventura, de proyectos y confesiones, de copas y alegrías. Amigos de cuando SECTOR todavía no había nacido y la revista EJUVA llevaba a toda España el pálpito del bingo y una defensa de sus intereses. Y que ya en aquéllas páginas primerizas, confeccionadas con la juventud ilusionante de quién pisa tierra desconocida y apasionante, daba cabida también a las inquietudes del recreativo que fueron creciendo y consolidándose.
Hablo de una época, principios de los ochenta, en la que aterricé en éste mundo del juego. Fue un tiempo de trabajo y pasión que me convirtió en cronista del despegue de un sector impulsado por tipos audaces, con talento natural y agallas que, partiendo de cero en no pocos casos, edificaron la que hoy es una industria sólida y con proyección de futuro
Han pasado los años y los amigos de SECTOR, que son muchos y que también lo son míos y de quienes hacemos la publicación, mantienen su fidelidad a la revista y a los que la representan. Y eso es algo que se pone de manifiesto con la celebración de EXPOJOC. Una iniciativa nacida de las ideas y la visión de José Ignacio Ferrer, padre de la criatura, que en cuatro ediciones ha sido objeto de un arraigo espectacular y un ir a más imparable que apunta hacia la escalada de metas ambiciosas.
EXPOJOC es una cita comercial de primer orden. Y un testimonio de la pujanza de un sector con enorme capacidad de repuesta para afrontar cualquier coyuntura por difícil que sea. EXPOJOC es un escaparate abierto a la inventiva del juego, que es mucha; a las ideas y los debates para configurar estrategias y al estrechamiento de las relaciones entre los profesionales. Y aquí es donde pongo énfasis y calor: nada es más reconfortante que el restablecimiento de los afectos espaciados por el tiempo, el abrazo al amigo, el recuerdo que perdura y aflora; la conversación que ilumina y ensancha el corazón. Son gestos y actitudes que elevan el espíritu. Todo éste cuadro profesional y humano se dibuja en EXPOJOC 2016