El año 2024 ha sido un periodo particularmente difícil para Enjoy, una reconocida cadena chilena de casinos, que ha enfrentado serios desafíos financieros y legales. A fines de enero, la empresa presentó una solicitud para iniciar su segundo proceso de reorganización en menos de cuatro años, buscando consolidar su sostenibilidad y crear nuevas bases para su proyección futura, teniendo en cuenta el bienestar de sus empleados, clientes, proveedores y acreedores.
En medio de esta reestructuración, la cadena anunció la salida de su gerente general, Esteban Rigo-Righi, quien dejará su cargo el 31 de diciembre. Rigo-Righi había asumido la dirección ejecutiva hace menos de un año, sucediendo a Eliseo García Martínez. El directorio de Enjoy ha designado a Carolina Gálvez Fuentes como nueva CEO, quien comenzará su gestión el 1 de enero, tras haber sido responsable de las relaciones con los inversionistas.
Rigo-Righi, en una carta interna, reflejó sobre su trayectoria de casi 15 años en Enjoy, destacando los desafíos enfrentados y valorando el trabajo en equipo que le permitió superar esos momentos difíciles. El directorio, por su parte, agradeció su compromiso y profesionalismo, especialmente en relación con la aprobación del Acuerdo de reorganización judicial de la empresa.
Sin embargo, las complicaciones no solo han sido internas. La Fiscalía Nacional Económica de Chile (FNE) acusó a Enjoy, junto a otras empresas del sector, de coludirse para manipular las licitaciones para la operación de casinos en el país. Esta colusión permitió a las empresas renovar sus permisos de operación durante 15 años con ofertas significativamente inferiores a las que se habrían presentado en un proceso competitivo. La FNE solicitó al Tribunal de Defensa de la Libre Competencia multas históricas, alcanzando un total de US$ 151,9 millones, de los cuales US$ 36,8 millones corresponden a Enjoy.
En resumen, Enjoy se encuentra en una encrucijada, enfrentando una reestructuración necesaria mientras lidia con graves acusaciones de colusión que podrían impactar aún más su situación financiera y reputacional. Foto: df