Autor

DESDE LA AVENIDA Juan Ferrer

Los nuevos actores

15 de noviembre de 2024

El cambio generacional impuesto por la rueda inexorable del tiempo deja sentir sus efectos en todos los sectores. Y el juego no podía ser ajeno a una paulatina transformación del escenario empresarial. Donde por causas de fallecimientos, jubilaciones o ceses voluntarios los antaño grandes protagonistas del sector han ido dejando vía libre al relevo. Y en los puestos de mando de las compañías van accediendo a las máximas responsabilidades gentes más jóvenes, con otros talantes, otros conceptos y otros sistemas de gestión que chocan en numerosas ocasiones con los métodos empleados por sus antecesores.

No pongo en cuestión que los relevos que se han producido y se irán produciendo en empresas señeras de la industria traen aparejado el ascenso a los puestos de mando de gentes quizás más preparadas que sus antecesores. Con perfiles dotados de una mayor formación académica, de más estudios y un nivel de conocimientos, al menos teóricos, superior.
En teoría esto es así y hay que asumirlo y, en ocasiones, celebrarlo. Pero también hay que admitir que en no pocas ocasiones se echa en falta el genio personal e intransferible de empresarios que hicieron su preparación en la dura universidad de la calle, que allí se forjaron y pelearon fuerte para salir adelante y sacar a flote sus empresas, algunas de las cuales, gracias a su genialidad indiscutible, alcanzaron la cima del éxito y aupada en ella siguen todavía.

No discuto los méritos que pueden atesorar quienes vienen protagonizando el cambio generacional en la industria. A la mayoría ni los conozco ni los trato. Por razón tan simple sigo añorando la presencia a pie de obra de los grandes luchadores de antaño, que son historia y recuerdo, que sin más título que su perspicacia y su pasión por el trabajo pusieron los cimientos de una industria que se engrandeció gracias a su visión y a su fé de indomables. Los que han venido detrás se lo encontraron hecho. Y en ocasiones lo dinamitaron.