José Fulgencio lleva siete meses de director y más de siete años vinculado al Grupo Orenes, que gestiona el centro de ocio. Encuentra que Unnic se está haciendo un hueco entre los gigantes de Caldea y Grandvalira.
¿Cómo han evolucionado este año las cifras de Unnic?
Entre abril y septiembre la facturación creció un 23%, unos 4,27 millones de euros. Y la buena noticia viene porque en el mismo tramo hasta octubre, la cifra asciende a 5,3 millones de euros, un 26%. Octubre ha sido el segundo mejor mes de facturación en el año y medio de historia de Unnic, detrás de diciembre porque entre las cenas de Navidad y las de empresa es el mejor mes del año en cuanto a restauración, y esto ayuda en lo que respecta al edificio. Respecto al casino, octubre ha sido también el mejor mes desde su apertura.
¿A qué atribuye ese hecho?
Yo todavía no conozco tanto a Andorra para saber cuándo empieza la temporada alta, pero yo tenía pensado que era más próximos a noviembre. La verdad es que después del verano ha continuado viniendo mucha gente, y lo mejor es que sigue viniendo mucha gente nueva.
¿Cuánta?
El cincuenta por ciento de las visitas hoy en día siguen siendo de primera visita. Es un dato muy importante que significa que nos sigue conociendo a mucha gente y, sobre todo, esa gente que viene al país ve a Unnic como un lugar al que ir, como ocurre con Caldea y Grandvalira.
¿Hay gente que viene expresamente a Andorra por Unnic?
Yo creo que sí. Cada día somos más conocidos y la gente viene intencionadamente a conocer a Unnic, somos capaces de atraer a gente. Al final estamos trabajando muy bien la parte de marketing, estamos invirtiendo mucho tanto en Francia como en España. Llevamos un año y medio abierto haciendo todo el equipo muy buen trabajo y ahora mismo se está viendo su fruto. Lo mejor es que esto todavía no tiene techo, no sabemos dónde está. Ya no sólo es Caldea y Grandvalira, también creo que Unnic se está convirtiendo y así será seguro un sitio de visita obligatoria cuando se viene a Andorra.
¿Cómo se reparte el grueso de las visitas?
En el tramo hasta septiembre tuvimos unas 126.000 visitas. En total, el 33% son de andorranos, 39% de españoles y un 11% de franceses, que han crecido un 40% respecto al pasado año.
¿Han logrado atraer clientes con un alto poder adquisitivo?
Unnic es un lugar para todos los bolsillos. Tenemos el Sports Bar, que es un sitio bastante económico donde se puede tomar una hamburguesa por diez euros; después tenemos el Red Bar, que se ubica dentro del casino, en el piso dos, con comida nikkei, de fusión japonesa y peruana; en la planta seis tenemos la parte de restauración, muy rica, con cocina mediterránea adaptada al país. Claro que tenemos el casino, pero no hace falta venir sólo a jugar. Se puede venir a ver un partido de fútbol, tomar un cóctel o una cerveza y después, arriba, ir también a la discoteca, que ha crecido un 150% su facturación respecto al pasado verano.
¿Qué peso le da a cada ámbito del ocio?
Ahora mismo, por orden, a cifra grande es el casino, obviamente, y la discoteca se ha equiparado a la restauración. Ha crecido mucho. El pasado sábado tuvimos en todo el edificio unas 1.500 personas, 2.000 si se cuentan las entradas y salidas, y la discoteca tiene capacidad para unas 600 personas.
¿Qué aporta Unnic al país?
Contribuye a la desestacionalización, lo que se ha demostrado al ser realidad esta primavera y después del verano. Pensábamos que hasta noviembre no empezaría la temporada alta y en realidad no hemos terminado de bajar la temporada, es decir, en verano y septiembre han estado muy bien y en octubre ha sido espectacular. La desestacionalización es lo que se está trabajando en el país, con la BTT o el Cirque du Soleil, el cual a nosotros nos vino genial porque vendimos packs del espectáculo y cena en Unnic a 800 personas. Si Andorra Turisme no hubiera llevado al Cirque du Soleil, seguramente estas personas no habrían entrado en Unnic. diarioandorra