La Comisión de Constitución y Justicia (CCJ) de Brasil tiene prevista una reunión para este miércoles (17), a las 10 horas, con 20 puntos en el orden del día. Uno de ellos es el proyecto que amplía la gama de juegos de azar autorizados en el país (PL 2.234/2022). Del ex diputado Renato Vianna (MDB-SC), el proyecto autoriza, entre otras modalidades, la operación de casinos y bingos, legaliza los juegos de azar y permite apostar en carreras de caballos. El ponente, el senador Irajá (PSD-TO), se muestra a favor de la cuestión.
El texto autoriza la instalación de casinos en centros turísticos o complejos integrados de ocio, bajo el límite de un casino en cada estado y Distrito Federal, con excepción de São Paulo, que podría tener hasta tres casinos, y Minas Gerais, Río de Janeiro. Janeiro, Amazonas y Pará, en los que el límite previsto para cada estado es de dos casinos. Según la propuesta, las casas de juego también podrán operar en embarcaciones marítimas y fluviales, que seguirán reglas específicas. El casino debe demostrar un capital social mínimo desembolsado de al menos R$ 100 millones y puede estar acreditado por 30 años.
La propuesta también establece reglas para el juego de bingo en formato cartón y electrónico, y permite en cada estado la acreditación de una persona jurídica por cada 700 mil habitantes para operar el juego. En este caso, las autorizaciones tendrán una vigencia de 25 años, renovables por el mismo período. Las carreras de caballos podrán ser explotadas por entidades de césped (vinculadas al césped) acreditadas por el Ministerio de Agricultura, que también podrán explotar, al mismo tiempo, juegos de bingo y videobingo.
En su informe, Irajá tachó como “concepto jurídico indeterminado” el atentado contra la moral y las buenas costumbres, utilizado como argumento contra el juego, y destacó que el proyecto busca trasladar al control estatal una práctica que hoy constituye un delito menor. Citando estadísticas sobre el mercado de apuestas legales o ilegales, Irajá concluye que “el juego ya constituye una actividad económica relevante”. El relator rechazó las enmiendas ofrecidas por los senadores y ofreció una enmienda de redacción reemplazando las menciones de “Ministerio de Economía” por “Ministerio de Finanzas”, según la Agencia del Senado.