He estado varias veces en Las Vegas. Me he paseado por sus principales y fantásticos hoteles. He desayunado escuchando muy cerca el sonido de las máquinas de los casinos. Y me he sentido fascinado y atrapado por una ciudad que es una inmensa mentira, espléndida mentira, y un milagro de la inventiva, de la audacia y de la capacidad creativa del ser humano.
Este año la Global Gaming Expo 2023 tiene por escenario el The Venetian de Las Vegas. El hotel donde me alojé en todos mis viajes. Y que rinde tributo a la recreación de la ciudad de los canales y las góndolas con una réplica perfecta de la plaza de San Marcos. Delante de unos ojos que no dan crédito a lo que ven se visualizan unas imágenes que son pura fantasía, ensueño de un instante, puesta de sol soñada cuando el reloj marca las tres de la madrugada y queda tiempo libre para detenerse en una trattoría y escuchar las notas amorosas desprendidas de la canción del gondolero.
Las Vegas es la sorpresa permanente. El cuento que nos hace retroceder en la historia y al propio tiempo nos catapulta hacia el futuro. Un ejercicio desbordante de imaginación, un ascua permanente de luz que inunda de estrellas multicolores su cielo.
La exposición del juego de Las Vegas responde a las señas de identidad de la ciudad: allí todo transpira grandiosidad, ingenio, pasión por las nuevas tecnologías. Están los que tienen que decir y aportar algo importante a escala global. Los que marcan el camino para coronar un futuro mejor y más avanzado. Los que se han comprometido con hacer de la industria del juego una locomotora de avance y progreso para dotar al mercado del ocio de los productos mejor acabados para garantizar la diversión y el entretenimiento.
Las Vegas, explosión creativa sin parangón. Catedral gigantesca y laica de las emociones desatadas. Paraíso de ficción con muchas evas dentro y múltiples manzanas tentadoras. Las Vegas, un sueño irrepetible con los gondoleros del The Venetian lanzando al aire los sones de las tarantelas napolitanas o los sonetos del amor perdido. Las Vegas, la gran tentación de cartón piedra que deslumbra y enloquece.
