SECTOR ha querido conocer cómo cierra el año el la industria de máquinas B en hostelería en Castilla- La Mancha. Por eso hemos entrevista, EN EXCLUSIVA, a Jesús María Molina, secretario general técnico de FAMACASMAN.
¿Existe alguna previsión sobre cómo se cerrará el parque de máquinas en Castilla-La Mancha en 2025?. ¿Al alza, a la baja, porcentaje?.
Todavía no tenemos datos del ejercicio. Las previsiones apuntan a que se siga la tendencia de años anteriores, en los que se ha registrado una leve reducción del parque de máquinas de tipo B debido a que continúa produciéndose un lento pero progresivo cierre de establecimientos de hostelería. Un dato a tener en cuenta es que, a diferencia de años anteriores, este año 2025 se ha agotado el cupo de las 100 máquinas nuevas que se pueden autorizar anualmente según lo establecido en la planificación vigente en la Comunidad Autónoma, lo que puede apuntar a que el balance final del ejercicio sea menos negativo que en años anteriores.
¿Cuáles han sido los principales logros a nivel asociativo y sectorial en 2025?.
Tras las modificaciones normativas aprobadas en la Comunidad y que entraron en vigor en el año 2022, en este ejercicio se han producido pocas modificaciones. No obstante, si hay que destacar la modificación de la Ley 5/2021, de 23 de julio, del Régimen Administrativo y Fiscal del Juego en Castilla-La Mancha, que se produjo en el mes de abril, con la que se reforzaron las garantías legales del uso obligatorio de la biometría en los controles de admisión exigibles en los establecimientos de juego.
¿Cuáles son los principales objetivos a nivel asociativo y sectorial para 2026?.
Tras los importantes cambios que se introdujeron en la reforma normativa del año 2022, las empresas necesitan un periodo de estabilidad. No esperamos que el año 2026 depare muchas novedades, pero desde la Federación estaremos, como siempre, muy pendientes de cualquier oportunidad que se presente para tratar de introducir algunas mejoras que consideramos que pueden ser positivas para la gestión de la actividad y para las empresas del sector.

¿Qué destacarían de forma positiva de la Administración durante este año y qué aspectos se debe mejorar para el futuro?.
Como aspecto más positivo hay que destacar el hecho de que se impulsara la reforma normativa antes comentada, relativa al uso de la biometría en los controles de admisión de los establecimientos de juego, elevando a rango de ley la declaración de interés público de su exigencia que anteriormente solamente estaba regulada en una norma reglamentaria. Consideramos que ello ha dado mucha más seguridad a las empresas que cuentan con locales de esta naturaleza.
En la gestión administrativa de las autorizaciones de juego tampoco se han reseñado graves incidencias, habiéndose renovado en este año la aplicación que utilizan las empresas para teletramitarse sus propias autorizaciones, en la que la principal novedad fue la recuperación de la opción de dar de alta nuevas máquinas que se había eliminado desde julio del año 2022. Como nota más negativa podría apuntarse que se sigue prolongando una cierta precariedad de personal en el Servicio de Juego de la Dirección General de Tributos y Ordenación del Juego, con algunas plazas sin cubrir, aunque la profesionalidad del resto de funcionarios de este servicio está evitando que ello se traduzca en graves consecuencias y perjuicios para las empresas. Es una cuestión que esperemos que se afronte y se solucione en los primeros meses de este próximo año.













