Las nuevas medidas que impulsa Argentina sobre la publicidad de apuestas en línea —en sintonía con lo debatido recientemente en el Senado de la Nación— refuerzan la necesidad de un enfoque integral para prevenir la ludopatía, especialmente entre jóvenes, regular la comunicación comercial del sector y combatir las plataformas sin licencia. El país se alinea así con estándares que ya llevan años aplicándose en Europa y otros mercados regulados, donde la protección del usuario se ubica en el centro de la agenda pública.
En esta discusión legislativa quedó claro que la prevención no depende únicamente de normas publicitarias, sino también de la infraestructura tecnológica detrás del ecosistema. En ese contexto, OKTO destaca que los pagos digitales son uno de los principales facilitadores de un juego más seguro, al permitir mapear depósitos a identidades verificadas, aplicar límites de gasto en tiempo real, asegurar que los fondos se muevan únicamente dentro de entornos autorizados y dotar a los operadores de herramientas concretas para implementar políticas de juego responsable.
“Argentina está dando un paso importante hacia estándares modernos de juego responsable, en línea con las mejores prácticas internacionales. Para quienes operamos en mercados regulados, esta evolución es familiar: los pagos son un elemento central para transformar la regulación en seguridad efectiva. Procesos como el mapeo de depósitos a identidades verificadas, los límites configurables y el movimiento de fondos solo dentro de entornos autorizados permiten a los operadores actuar de manera preventiva y no reactiva”, dijo André Boesing, Gerente General, Cono Sur para OKTO.
Entre estos avances, la industria local comienza a adoptar modelos donde los datos, la trazabilidad y la infraestructura regulada se convierten en herramientas clave para prevenir la ludopatía, reforzar la protección de jugadores vulnerables y brindar mayor visibilidad a las autoridades. Un ecosistema de pagos moderno no solo acompaña la normativa, sino que la potencia, permitiendo implementar controles en tiempo real y elevando el nivel general de cumplimiento.
“Nuestro rol en OKTO es claro: ofrecer una infraestructura de pagos que haga posible este modelo. En Argentina, esto significa depósitos basados en CVU confiables y trazables, que conectan a jugadores verificados con operadores con licencia y fortalecen los marcos de juego responsable. Cuando los flujos de pago son transparentes y totalmente rastreables, todo el ecosistema se beneficia: los jugadores están más protegidos, los operadores pueden cumplir mejor y los reguladores ganan visibilidad real. Este compromiso es un pilar fundamental de nuestro enfoque de “jugar diferente” en el sector, para ayudar a los comerciantes a crear usuarios y experiencias de pago que sean distintas, personalizadas y totalmente compatibles”, concluyó André Boesing, Gerente General, Cono Sur para OKTO.
