La Asociación Europea de Casinos publica un informe de Yield Sec sobre el juego online ilegal, que revela una pérdida anual de 20.000 millones de euros de los impuestos de la UE. Un nuevo estudio encargado por la Asociación Europea de Casinos (ECA) y realizado por Yield Sec, una plataforma global de inteligencia que monitoriza el mercado del juego online, revela cifras alarmantes sobre la magnitud y el crecimiento del juego online ilegal en Europa en 2024.
El análisis reciente muestra que los operadores de juego online ilegal representan actualmente el 71% del mercado del juego online de la Unión Europea, con unos ingresos brutos estimados de 80.600 millones de euros, más del doble de los 33.600 millones de euros del mercado legal.
El estudio identifica a más de 6.200 operadores de juego ilegal que se dirigen activamente a los consumidores de la UE online, con 81 millones de europeos expuestos a servicios de juego ilegal o que interactúan con ellos. Con un tipo impositivo del 25 % para el juego online en toda la UE, la entidad de seguimiento e información Yield Sec estima que los operadores ilegales desviaron más de 20 000 millones de euros en ingresos fiscales de las economías europeas solo en 2024.
Estos fondos deberían haber servido para apoyar a la UE en el impulso de la competitividad de sus industrias, la formación de su mano de obra o la inversión en investigación e innovación.
Erwin van Lambaart, presidente de la Asociación Europea de Casinos (ECA), comentó: «Estos hallazgos confirman lo que la ECA lleva años advirtiendo: el juego online ilegal no es un problema menor; es una amenaza económica y social. Cada euro perdido a manos de operadores criminales es un euro robado a los ciudadanos europeos, a las empresas legítimas y con licencia, y a nuestras comunidades. Como ECA, mantenemos nuestro compromiso de colaborar con las autoridades europeas y nacionales para proteger a los consumidores, combatir estas actividades delictivas, defender la integridad de nuestra industria y garantizar que los beneficios de una industria bien regulada no se vean menoscabados por los operadores ilegales».









