La Kansspelautoriteit (KSA), el regulador del juego en los Países Bajos, ha informado que la tasa de canalización de los ingresos brutos del juego ha caído por debajo del 50% en el primer semestre de 2025, descendiendo del 51% en el segundo semestre de 2024 al 49%. Este descenso ha sido calificado como un «acontecimiento preocupante» en el contexto del debate sobre la efectividad de la normativa neerlandesa para equilibrar el atractivo del mercado legal con la lucha contra los operadores ilegales.
La KSA sugiere que esta disminución podría deberse a que los jugadores están optando por el mercado ilegal para eludir las nuevas normas de protección del jugador, que son percibidas como restrictivas. Entre estas medidas se encuentran los límites de depósito mensuales por cuenta, implementados a finales de 2024, que han llevado a una reducción en la pérdida mensual promedio de los jugadores, de 146 € a 119 €.
Como resultado de estas restricciones, los ingresos brutos del juego han disminuido de 697 millones de euros a 600 millones de euros. A pesar de esta caída, el número de cuentas de jugadores ha aumentado, pasando de un promedio de 1,18 millones a 1,29 millones. Sin embargo, la KSA aclara que el número de cuentas no se traduce directamente en el número de jugadores individuales, ya que un solo jugador puede tener múltiples cuentas.
Se estima que en el primer semestre de 2025, había aproximadamente 839,000 jugadores activos con operadores autorizados, lo que representa el 5,7% de la población adulta, un ligero aumento respecto al 5,4% del semestre anterior. Los jóvenes adultos de entre 18 y 24 años constituyen un segmento significativo, representando el 23% de todas las cuentas activas, a pesar de que solo constituyen el 9,3% de la población adulta. Sin embargo, su gasto promedio es menor, con pérdidas de 37 € al mes, en comparación con 78 € para los adultos en general.
