Las apuestas deportivas se han convertido en un objetivo principal para las redes criminales, que utilizan diversas tácticas para estafar a los usuarios. Entre las estrategias más sofisticadas, se incluyen el uso de bots y antenas parabólicas para adelantarse a los resultados en directo. Un ejemplo notable de esto fue una operación desmantelada en Guadalajara, donde se estima que se estafaron más de 20 millones de euros.
Estafa del Falso Premio
Este esquema comienza con un mensaje que promete una “lotería de Betway” o una recompensa por fidelidad. Las víctimas son contactadas y se les solicita el pago de pequeñas comisiones o tasas de gestión para poder cobrar el supuesto premio. Sin embargo, una vez que la víctima paga, nunca recibe el premio prometido, resultando en la pérdida de su dinero y de sus datos personales.
La emoción de asistir a eventos deportivos o comprar merchandising oficial, como camisetas de equipos, también ha sido explotada por estafadores. Las entradas falsas son una de las trampas más comunes. Los estafadores crean páginas que imitan a portales oficiales y ofrecen descuentos irresistibles o sorteos de tarjetas regalo. Al final, los usuarios que caen en la trampa pagan por un acceso que nunca llega, quedándose sin su dinero y sin la entrada.
