Carlos Liébana Presidente de ASMAREM Femara-Madrid analiza la evolución del parque de máquinas B, a partir de los datos que ASMAREM y ANDEMAR-MADRID vienen recabando de la Subdirección General de Juego, prestando especial interés a las máquinas recreativas con premio programado, tipo B-B1 instaladas en su gran mayoría en la hostelería madrileña.
En 2024 el parque de máquinas tipo B-B1 mantuvo su tendencia a la baja. Un (-2,5%) respecto a 2023 y un (-21%) si lo comparamos con el dato del ejercicio 2019, antes de la pandemia. Gráfico 1.
El número de máquinas tipo B2, que se instalan en locales específicos de juego se mantuvo estable en 2024, con escasa variación respecto 2023, si bien aumentaron su número de puestos, superando los niveles de 2019, antes de la pandemia. Por primera vez el número de puestos de máquinas tipo B2 superó a los puestos de máquinas tipo B-B1. Gráficos 1 y 2
Las máquinas de tipo B3 basadas en el juego del bingo continúan su descenso, más evidente en su número de puestos. Gráficos 1 y 2
El parque de máquinas recreativas con premio tipo B-B1 está unido al sector de hostelería, donde se instalan en una abrumadora mayoría. Gráfico 3.
El descenso en el parque de este tipo de máquinas es consecuencia directa de la disminución, también continuada, del número de locales de hostelería autorizados para instalarlas que se viene evidenciando desde hace más de quince años.
Son múltiples los factores los que intervienen en este retroceso. No solo el de “la nueva hostelería”, también la baja rentabilidad en muchos casos por los gastos que debe afrontar la empresa operadora. No hace tantos años que en la Comunidad de Madrid, operaban las máquinas recreativas con premio más de mil empresas. En la actualidad el último dato del registro de juego en 2024, arroja la cifra de 830.
Lo que está claro es que el futuro, al igual que el pasado y el presente de la máquina recreativa con premio B1 está en la hostelería. De ahí la importancia de seguir ofreciendo un producto atractivo que vaya evolucionando al igual que lo hace el local donde se instala.
