ASEJU celebró ayer asamblea general. Uno de los temas que se abordaron fue la consulta pública del Decreto con normativa de Juego en la Comunidad de Madrid. Un texto que aún no ha recibido la firma de la Administración. Desde la entidad han trasladado a los responsables del juego que una vez recibida esta información se adoptará un plazo de tiempo para recoger las sugerencias de los asociados y así configurar las alegaciones. El Decreto se basa en una modificación del registro del juego. Las distintas asociaciones del sector aprovecharán la resolución para trasladar sus propuestas. Se espera que antes del mes de agosto haya salido la consulta pública y se presenten las alegaciones.
Miguel Garrido, presidente de CEIM, asistió a la asamblea. Reiteró su «colaboración estrecha y directa» con el sector de bingos de la Comunidad de Madrid y abundó en la cooperación mutua.
Otra de las cuestiones abordadas fue la negociación colectiva tanto del Convenio Marco Estatal como del Autonómico. En relación al Estatal es posible que hasta septiembre no se produzca ninguna reunión puesto que se debate sobre las treinta y siete horas y media laborales. «Una vez se reúna la Comisión negociadora del Convenio Marco Estatal posteriormente nos reuniremos con los agentes sociales para abordar el convenio autonómico», señala José Luis Merino, secretario general de ASEJU. Las posiciones en el Convenio Autonómico a día de hoy están alejadas. La patronal advierte que el año pasado se cerró el ejercicio económico en un -12,05% en ventas con respecto al año 2019 (período pre-pandemia). «Esto significa que muchas salas no son rentables. Tenemos una situación muy ajustada y para muchos bingos muy crítica. Esto impide que podamos hacer «grandes concesiones» en la negociación», manifiesta Merino.
Desde ASEJU activan el reloj para ver qué va a pasar en el texto estatal y se aproximen planteamientos. Todo va a venir condicionado por el desarrollo del sector en los próximos meses y si «el bingo mejora». Si el Decreto incluyera alguna mejora a implementar en las salas la materialización del convenio autonómico sería más fácil porque significaría «que tendríamos un futuro mejor del que tenemos», en palabras del secretario general de ASEJU.