La NCAA está considerando un paso histórico al revisar su prohibición sobre las apuestas en deportes profesionales. Esta propuesta, que fue iniciada por la Junta Directiva de la División I y enviada al Consejo de la División I para un análisis más profundo, podría entrar en vigor a finales de junio si es aprobada.
Actualmente, atletas, entrenadores y personal de la NCAA tienen prohibido apostar en ligas profesionales, incluyendo deportes que también se practican en el ámbito universitario, como fútbol americano, baloncesto, hockey, béisbol, golf y tenis. Sin embargo, la creciente legalización y popularidad de las apuestas deportivas en Estados Unidos, especialmente en los campus, ha dificultado la aplicación de estas restricciones.
El aumento de casos relacionados con infracciones y cuestiones de elegibilidad vinculadas a las apuestas ha puesto presión sobre los equipos de Cumplimiento de la NCAA y las universidades. Aunque la organización podría relajar las reglas respecto a las apuestas en deportes profesionales, fuentes internas aseguran que las restricciones en los deportes universitarios probablemente permanecerán firmes.
Este movimiento refleja los esfuerzos de la NCAA por adaptar sus normas a un escenario de apuestas en constante cambio, intentando mantener la integridad y la esencia del deporte colegial en medio de esta transformación.