Los dos referentes nacionales del juego y las apuestas, Cirsa y Codere, son dos empresas que nacieron con dos años de diferencia, entre 1978 y 1980, pero que transcurrido todo este tiempo su desenlace no ha podido ser más diferente. Esta semana se ha sabido que Cirsa ha dado un paso más en su intención de salir a Bolsa hacia finales de año o principios del que viene y el objetivo de su actual dueño, Blackstone, es obtener una valoración próxima a los 5.000 millones de euros, para lograr que su inversión haya sido rentable. Esta cantidad es algo más del doble del precio al que se la compró en 2018 a Manuel Lao, su fundador, y a ello habría que sumar varias inversiones adicionales los últimos años como la compra de Giga Games System Operation al hermano del fundador, Juan Lao, por unos 200 millones de euros, y el 50% que no controlaba de Sportium también en 2019 a Ladbrokes por otros 70 millones de euros.
Fuentes financieras reconocen que, aunque la operación está todavía en pañales, lo habitual sería que Blackstone colocase cerca del 40% del capital en el mercado para, en años posteriores, ir acometiendo paulatinamente el total de la desinversión.
Cirsa es, de hecho, la única compañía donde el gigante del mundo de la inversión Blackstone está presente en España a través de su equipo de capital privado, más allá de sus múltiples adquisiciones en el sector inmobiliario y su presencia residual en infraestructuras. También tiene un 25% de Abertis por la vía italiana de Atlantia de forma indirecta. Hace seis años la familia Lao pasó a engrosar las listas de las grandes fortunas de nuestro país después de vender el 100% de su compañía al fondo estadounidense por una cuantía que nunca llegó a desvelarse públicamente. Manuel Lao, el fundador, está presente en el accionariado de varias firmas cotizadas, como Merlin Properties y Sacyr a través de la patrimonial familiar, Nortia Capital Investments. En marzo de 2020 elevó su participación hasta el 6,2% de la socimi que capitanea Ismael Clemente y alcanza un valor de mercado actual de cerca de 320 millones de euros. Ese mismo año Nortia cambió su sede social desde Barcelona a Madrid. Manuel Lao es también accionista relevante de Sacyr, con el 5,1% del capital de la compañía. Este paquete de acciones alcanza un valor de 130 millones de euros.
Según el ranking elaborado por EL MUNDO de Los más ricos de España 2024, Manuel Lao y familia ocupan el puesto 47 de la lista con un patrimonio estimado de 1.225 millones de euros. Su patrimonial suma un total de 97 empresas y está dirigido desde mayo de 2023 por Juan Antonio Alcaraz, el histórico banquero de CaixaBank que desde enero de este año también es consejero de MyInvestor.
El otro gran clan de las apuestas y el juego en España, la familia Martínez Sampedro, optó por otro camino, menos fructífero, sin duda, para sus fundadores. En la década de los 80, casi de forma paralela Codere inició su expansión internacional hacia América Latina y también países como Italia. El 19 de octubre de 2007, la empresa comenzó su andadura en la Bolsa de Madrid que duraría hasta mayo de 2022, cuando fue excluida de manera definitiva. El año antes sus acciones habían llegado a perder más del 90% de su valor después de que la compañía entrara en fase de liquidación, incapaz de contener sus números rojos y tras una pandemia que resultó fatal para las salas de juegos.
Pero hasta llegar allí el camino había estado lleno de piedras. En 2014 la compañía se vio obligada a llevar a cabo una reestructuración y el rey de las tragaperras quedó en manos de sus bonistas. Ellos mismos fueron los que decidieron cuatro años más tarde, en 2018, echar de la presidencia de la firma a los Martínez Sampedro a quienes se acusaba de administración desleal. Fueron condenados en 2022 por un juzgado de Madrid y todavía hoy colea la guerra abierta entre Codere y sus antiguos dueños. Pero su periplo en Bolsa ha continuado a través de su filial de juego online que aterrizó en Wall Street hace tres años aprovechando la carcasa que le proporcionó una SPAC (que son vehículos creados ad hoc para acoger a quien quiera salir a Bolsa por la vía rápida, y no de forma tradicional). En el año sube un 170%, con una capitalización de 370 millones de euros, unas trece veces menos que el valor bursátil al que aspira Cirsa en su debut.
A cierre de 2023, Codere alcanzó un ebitda de 206 millones de euros, tres veces menos que Cirsa (con 630 millones de euros y crecimiento del 14%), y unos ingresos de 1.429 millones de euros vs los casi 2.400 millones de Cirsa.
QUIÉN ES CIRSA
El nuevo aspirante a la Bolsa española fue fundado en 1978 por Manuel Lao para administrar el negocio de las máquinas recreativas en Hoteles, restaurantes y cafeterías. El Casino de Marbella fue su primer establecimiento de estas características abierto en España en 1985. En 1989 acceden también al negocio del bingo con dos salas en Zaragoza y Castellón. A partir de la década de los 90 la compañía empieza su expansión internacional y lo hace a partir de la apertura de un primer casino en República Dominicana. En 1996 llega a EEUU, y un año después lo hará a Italia y Panamá.
En 1998 Manuel Lao compra la participación de su hermano Juan y adquiere el control total de la compañía, para doce meses después inaugurar el primer casino flotante instalado en un barco en Buenos Aires (Argentina). La compañía de Terrasa es, además, un viejo conocido de los mercados financieros, con siete emisiones de bonos realizadas desde el año 2003 en la Bolsa de Londres. Sportium, su marca estrella, se convirtió en la casa de apuestas oficial de La Liga de fútbol en la temporada 2014-2015. Desde la entrada de Blackstone en 2018 la compañía ha vivido una auténtica revolución de adquisiciones hasta llegar a día de hoy. En los últimos seis años Cirsa habría multiplicado por más de dos veces su valor.
España es el principal país para el grupo con el 42% de los ingresos y casi la mitad del beneficio bruto; seguida de Italia, con un 25% de las ventas, Panamá, con el 10%, y México y Colombia. De todas sus actividades la que más aporta es el negocio de los casinos con casi el 60% del beneficio, mientras que las máquinas recreativas aportan prácticamente otro tercio de las ganancias y el online está ya en el 10%, según las últimas cifras anuales publicadas por la compañía correspondientes a 2023. elmundo