El Gobierno vasco ultima una orden para establecer controles más férreos para las máquinas tragaperras de fichas. Se trata de un tipo de aparatos mucho más modernos que los recreativos tradicionales, que ofrecen numerosas posibilidades a los jugadores y que se han multiplicado en los últimos años en bares y salones de juego. Fuentes del sector calculan que en Euskadi hay más de 500 máquinas de estas características, que permiten cambiar el dinero en fichas o puntos virtuales en determinados juegos. El problema es que sus características técnicas las sitúan «en una especie de limbo legal».
La idea de «regular» este tipo de máquinas ha sido tratada ya en el Consejo Vasco de Juego. Se trata de una iniciativa de calado, según las fuentes del sector consultadas por EL CORREO, ya que Euskadi se convertirá en la primera comunidad autonómica que pone límites más duros a este tipo de dispositivos de juego.
El proyecto persigue aportar más transparencia al sector, aunque se encuentra todavía en fase embrionaria, según explican a este periódico fuentes oficiales del Departamento de Seguridad. Es decir, existe la voluntad de establecer controles para este tipo de máquinas, pero todavía no se conocen las medidas concretas que se pondrán en marcha.
La dirección de Juego y Espectáculos ha redactado un borrador de la orden, que ha llegado esta semana a empresas y asociaciones del sector. El próximo paso será su publicación en el Boletín Oficial en las próximas semanas y la apertura de la fase de alegaciones. A partir de ahí, los interesados podrán proponer cambios en la orden antes de que se redacte su texto definitivo. Leer noticia completa en elcorreo