La urbe de Las Vegas nació de la nada hace 80 años en el desierto de Nevada (EE UU). A semejanza de ese templo del juego, en el perdido pueblo de Castilblanco (Badajoz) quieren construir una ciudad de ocio que atraiga a millones de personas cada año. Y sus impulsores ya han conseguido dar un paso muy relevante.
La Junta de Extremadura ha cumplido esta semana un hito histórico en esa comunidad, al utilizar por primera vez la ley que permite la construcción de grandes proyectos en la región. Ese plan pionero es Elysium City, lo que se prevé que sea una gigantesca operación urbanística de 8.000 millones de euros para levantar hoteles, casinos, parque temático, parque acuático, centro de gaming, viviendas, centro comercial, entre otras muchas infraestructuras, en la depauperada comarca conocida como La Siberia extremeña.
El macroproyecto lleva cocinándose desde hace más de cinco años, pero ha sido esta semana cuando el Diario Oficial de Extremadura (DOE) ha publicado el plan de ordenación, en el que se aporta la documentación y los permisos de lo que se denomina en la región como gran instalación de ocio. La Junta presidida por Guillermo Fernández Vara (PSOE) aprobó en julio de 2018 la conocida como Legio (Ley Extremeña de Grandes Instalaciones de Ocio), que amparaba esta actuación.
El promotor asegura que puede pedir licencia para 33 casinos
Inicialmente, este proyecto fue conocido como un Eurovegas (por la semejanza del que el empresario Sheldon Adelson había presentado en Madrid), aunque ha ido variando para ganar peso en parques temáticos y de gaming frente a los casinos. La autorización del Gobierno de Fernández Vara llega tras la aprobación de todos los informes, por ejemplo el ambiental. El Ejecutivo socialista da seis meses para comenzar la obra y cinco años para concluir. Además, la norma obliga a invertir al menos 1.000 millones en este tipo de grandes instalaciones.
El promotor de este proyecto de un Las Vegas nacido en un lugar remoto (y en versión europea) es la pequeña compañía Castilblanco Elysium Corporation, tras la que se encuentra el empresario sevillano Francisco Nuchera, que llegó a esa zona pacense junto al embalse de García de Sola hace 20 años. Desde entonces, ha intentado lanzar grandes operaciones, pero es ahora cuando ha conseguido los permisos y el arropamiento de la Junta.
Para que esta megaoperación tenga éxito, dependerá de que algún gran inversor o empresa crea en él. De momento, Nuchera asegura a Cinco Días que está negociando con siete operadores internacionales y otro nacional, además de que en breve tomarán una decisión sobre quién será el operador principal, de lo que dependerá que algunos aspectos, como los casinos, tengan más o menos importancia. “El proyecto es camaleónico”, afirma.
La prensa extremeña anunciaba esta semana que Elysium City no tendrá casinos, pero Nuchera aclara que en cualquier momento del desarrollo pueden solicitar hasta 33 licencias vinculadas a los hoteles, dependiendo del interés del operador que esté tras la iniciativa. El empresario, además, asevera que “el ancla” o polo de atracción para los millones de visitantes previstos al año tiene que ser el parque temático. cincodias