ANESAR celebrará éste año la conmemoración del cuarenta aniversario de su fundación como entidad encargada de aglutinar en su seno los intereses de los salones de juegos. Han sido cuatro décadas dedicadas de manera afanosa y efectiva a darle a los salones una identidad propia y en base a ésta condición ocuparse de manera gradual de sus normativas y los consiguientes procesos de evolución, de la modernización de sus espacios y servicios y del incremento y avances de sus ofertas y distracción y entretenimiento. Y en ése campo, crucial para el desarrollo de los salones como negocios con futuro, no cabe la menor duda de que ANESAR viene realizando una labor de grandísima importancia. Y lo ha hecho desde el ámbito del análisis, del manejo de los datos, del rigor y también de la autocrítica, ejercicio que se impone muchas veces si se desean alcanzar determinados objetivos.
El salón de juegos como concepto viene experimentando una transformación espectacular de unos años a esta parte. Tanto en su apariencia como en sus contenidos. Y un crecimiento quizás desmesurado en determinados territorios. De todo ello y de los problemas que se derivan de campañas de descrédito basadas en prejuicios ideológicos se ha venido ocupando con mucha lucidez y mesura ANESAR en los últimos tiempos. Dando muestras de una madurez asociativa admirable y de una capacidad de interlocución muy sólida en su argumentario para romper con tino y datos a los injustificados ataques de que viene siendo objeto.
Para conmemorar el cuarenta aniversario ANESAR cuenta con un presidente solvente, José Vall, con una ejecutoria de más de diez años en el cargo caracterizada por la claridad de ideas y el buen sentido. Y a su lado Juan Lacarra, secretario general y jurista de probada experiencia que marca con templanza y conocimientos la marcha asociativa. Son cuarenta años que han dado mucho juego en los salones y de los que ANESAR es destacado partícipe.
